Son venas hinchadas y dolorosas en la porción baja del recto o del ano.
Las hemorroides son muy comunes, especialmente durante el embarazo y después del parto. Éstas resultan del aumento de la presión en las venas del ano. Dicha presión provoca que las venas se hinchen, haciendo que duelan, particularmente cuando usted está sentada.
La causa más común es el esfuerzo durante la defecación.
Las hemorroides pueden ser causadas por:
- Esfuerzo durante las deposiciones.
- Estreñimiento.
- Sentarse durante períodos de tiempo prolongados.
- Infecciones anales.
- Ciertas enfermedades, como la cirrosis hepática.
- Las hemorroides internas se presentan justo dentro del ano, donde comienza el recto.
- Las hemorroides externas ocurren en el orificio anal y pueden colgar por fuera del ano.
Los síntomas de hemorroides incluyen:
- Prurito anal
- Dolor anal especialmente mientras se está sentado
- Sangre roja brillante en el papel higiénico, en las heces o en la taza del inodoro
- Dolor durante la defecación
- Una o más protuberancias duras y sensibles cerca del ano
Con frecuencia, un médico puede diagnosticar las hemorroides simplemente examinado el área rectal. De ser necesario, se pueden realizar los siguientes exámenes para ayudar con el diagnóstico:
- Guayacol en heces (muestra presencia de sangre)
- Sigmoidoscopia
- Anoscopia
El tratamiento para las hemorroides abarca:
- Las cremas corticosteroides de venta libre para ayudar a disminuir el dolor y la hinchazón.
- Las cremas para hemorroides que contienen lidocaína para ayudar reducir el dolor.
- Los ablandadores de heces ayudan a reducir el esfuerzo y el estreñimiento.
- Utilizar ropa interior de algodón.
- Evitar el papel higiénico con perfumes o colores; usar toallitas para bebés en lugar de esto.
- Tratar de no rascarse el área.
Si sus hemorroides no mejoran con los tratamientos caseros, usted puede necesitar un tipo de tratamiento con calor, llamado coagulación infrarroja, para encoger las hemorroides. Esto puede ayudar a evitar una intervención quirúrgica.
La cirugía que se puede hacer para tratar las hemorroides incluye ligadura con banda de caucho o la hemorroidectomía quirúrgica. Estos procedimientos generalmente se utilizan para pacientes que presentan dolor o sangrado intensos y que no hayan respondido a otra terapia.
La sangre en las venas hinchadas puede formar coágulos y el tejido circundante puede morir. La cirugía con frecuencia se necesita para extirpar hemorroides con coágulos.
También se puede presentar sangrado intenso. La anemia ferropénica puede ser el producto de una pérdida de sangre prolongada. Sin embargo, no es usual que se presente sangrado considerable con las hemorroides.
Consulte con el médico si los síntomas de las hemorroides no mejoran con el tratamiento casero. Igualmente, el médico debe verlo si presenta sangrado rectal. Es posible que el médico esté interesado en buscar otras causas más serias del sangrado.
Llame al número local de emergencias (como el 911 en los Estados Unidos) si usted pierde mucha sangre o si está sangrando y siente vértigo, mareo o se desmaya.
El estreñimiento y el esfuerzo durante las defecaciones aumentan el riesgo de hemorroides. Para prevenir el estreñimiento y las hemorroides, usted debe:
- Tomar mucho líquido, por lo menos ocho vasos al día.
- Consumir una dieta rica en fibra de frutas, verduras y granos integrales.
- Pensar en tomar suplementos de fibra.
- Usar ablandadores de heces para prevenir el esfuerzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario