Para hablar de medicina... sin complicaciones...

Aqui hablamos de Medicina sin jeroglificos, tratando de explicar y hacernos entender... enfasis en Neurociencias pero si hay que hablar de otras ramas medicas, pues lo hacemos...!!! Bienvenidos y gracias por estar...!!!

lunes, 21 de noviembre de 2011

EL ARTE DE ENSEÑAR ANATOMIA

(extraido de Diario Medico publicado hoy 21 de noviembre de 2011 y dedicado con cariño a todos mis Maestros de Anatomia y a quienes enseñamos Anatomia Humana)

La representación del cuerpo humano es el gran reto del artista. Los grandes fisonomistas están en los lugares preferentes de los museos. Pero, con la excepción del polifacético Leonardo da Vinci, algunos de los mejores dibujantes de la anatomía humana son muy poco conocidos del gran público. Pero sus ilustraciones han servido para que médicos y cirujanos aprendan dónde cortar y actuar. Desde la revolución artístico-científica que trajo Vesalio en el siglo XVI, los atlas de anatomía no han dejado de perfeccionarse en calidad y precisión.



 Durante mil quinientos años, la autoridad del griego Galeno en la anatomía humana fue indiscutible. Y eso que jamás había disecado un cadáver. Sólo en dos ocasiones pudo estudiar la estructura ósea completa del cuerpo humano: el de un esqueleto despojado de su carne por aves de rapiña y otro que había quedado al descubierto tras permanecer largo tiempo en un río.

En el siglo XV Leonardo da Vinci intentó escribir un tratado de anatomía. Pero su proverbial inconstancia y su mente indiscriminada se lo impidieron. Las 5.000 páginas de sus notas manuscritas se dispersaron a su muerte y hasta finales del XIX no fue reconocido como un pionero de los estudios anatómicos.

Sin ser un genio universal como Da Vinci, Andreas Vesalio en el siglo XVI fue para la anatomía lo que la obra de Copérnico para la astronomía. Su famosa De humanis corporis fabrica, un volumen tamaño folio de 663 páginas muy bien impreso, apareció en agosto de 1543, cinco años después de que Mercator publicara su Mapa del Mundo, y revolucionó la comprensión y la enseñanza de la anatomía humana. 

Dado que estaba decidido a demostrar con la máxima precisión sólo lo que había confirmado con sus propios ojos y manos, a través de las disecciones que hizo en la Universidad de Padua, sabía que el valor científico de su producto dependería de la calidad de las ilustraciones. De modo que buscó y luego supervisó a los mejores artistas para realizar los dibujos. Él mismo era un dibujante de talento y realizó algunas de las figuras. Las demás fueron obra de pintores de la escuela de Ticiano.

La precursora Italia pasó el testigo de los estudios anatómicos a Holanda en el siglo XVII, como lo muestran las numerosas pinturas que representan diferentes lecciones de anatomía. El arte de la ilustración médica alcanzó la cima con los once volúmenes de Jean-Marc Bourgery, Claude Bernard y Nicolas-Henri Jacob, editados entre 1866 y 1871. Poco antes había aparecido la Anatomía del inglés Henry Gray (1858), cuyo éxito, al margen de la serie televisiva, lo atestiguan las 40 ediciones que llevaba hasta 2008.

 NUEVA ORIENTACION

En los estudios de Medicina, "el conocimiento del cuerpo humano, tanto desde el punto de vista morfológico como funcional, es el objeto principal, sin olvidar que se ha de relacionar con una persona y su entorno, en el sentido más amplio", dice Àlex Merí, profesor de Anatomía en las facultades de Ciencias de la Salud de las universidades Ramoll Llull y Pompeu Fabra, de Barcelona, y asesor científico de la Editorial Médica Panamericana. 

La anatomía se erige así como una disciplina básica en los estudios sanitarios, y los manuales, como referencia imprescindible de aprendizaje. "Hace años -continúa Merí- el profesor era el punto de referencia, daba su clase magistral y, en algunos casos, la cantidad de información no tenía ningún otro filtro. Además, la anatomía solía estar hipertrofiada con excesivos detalles prescindibles. Poco a poco se han ido delimitando cuáles son los contenidos esenciales, y no porque sí, sino orientados a una carrera con unos objetivos determinados. Es decir, se le ha dado una perspectiva, clínica o funcional, y transversalidad, proyectándola hacia otras disciplinas, para integrarla más en los conocimientos generales que se han de adquirir". Y precisa que "el profesor ya no es el foco de atención sino el guía del aprendizaje, que acompaña a los alumnos en la adquisición de unos conocimientos anatómicos más realistas y adaptados".
En esta línea, destaca claramente "el adelgazamiento de los grandes manuales. Los clásicos Testut, de cuatro volúmenes, han pasado a dos volúmenes con el Latarjet-Ruiz Liard; el famoso Gray de dos volúmenes se ha reconvertido en un Gray nuevo para estudiantes; los Rouvière de tres volúmenes casi no se encuentran, y otros muchos manuales han ido desapareciendo como los Orts Llorca, Spalteholz, Pernkopf, etc.". 

De todos modos, insiste en que, aunque se usan en algunas facultades, su detallismo supera lo que los estudiantes necesitan y algunos no son muy didácticos. "La nueva generación de libros ha contemplado un texto más escueto, generalmente unificando los contenidos en un volumen y con una orientación clínica o aplicada, por ejemplo el Moore, Lippert, Snell…, e incluso en libros de bolsillo como el Benninghoff-Drenckhahn, o los Platzer-Fritsch-Kahle". 

Esta tendencia a la concisión se refleja en la pervivencia de los atlas de anatomía -una imagen vale más que mil palabras-, algunos de los cuales, según Merí, son verdaderas obras de arte, como los clásicos Sobotta, Netter y Grant. "Actualmente, los manuales de anatomía han de tener una gran presencia de la imagen, un texto acompañante conciso y una visión aplicada de los conocimientos que se adquieren".

ARTISTAS CIENTIFICOS
 
Poco conocidos del gran público, los dibujantes del cuerpo humano dirigidos a la enseñanza médica han preferido el ámbito científico al de la pinacoteca. Y han tenido que sustitutir los modelos humanos de escuela de Bellas Artes por cadáveres diseccionados en las facultades de Medicina. "Aunque es una cuestión de gusto, personalmente me encantan las ilustraciones de Erich Lepier (Sobotta y Pernkopf), Bratke (Pernkopf) y Wesker (Prometheus) que son de una tendencia más realista. En referencia a los manuales, de la vieja escuela sigo Testut-Latarjet y Orts Llorca, y de los más modernos recomiendo Moore, Prometheus, Gray para estudiantes o Benninghoff-Drenckhahn".

La revolución digital y la era de internet han multiplicado las opciones. De todos modos, Merí matiza que "las pantallas del ordenador no son tridimensionales, sólo lo simulan visualmente. Por esta razón, son irremplazables las prácticas en la sala de disección con modelos anatómicos".

Y en cuanto a la dualidad libro impreso y contenidos electrónicos afirma que "aún queda mucho por avanzar, pero es evidente que las nuevas tecnologías van a ir imponiéndose. La principal ventaja es que los contenidos pueden tener diferentes formatos: texto, imágenes, animaciones, vídeo…, y en 3D, lo que permite una recreación más real. Y los contenidos son más fácilmente actualizables, tanto de texto como añadiendo estructuras. No obstante, también representa un ejercicio mental el paso de los dibujos clásicos de los atlas convencionales a su representación tridimensional". En esta línea cita los proyectos Google Body, Visión Médica Virtual y Primal Pictures, entre otros. Aun así recuerda que en las facultades de Medicina "los libros físicos continúan siendo la referencia: portables, disponibles en todo momento, tangibles físicamente y contrastados como fuente formativa".

Impresa o digital, la anatomía no es una ciencia estática. Su correcta descripción y representación ayuda a mejorar las vías de abordaje quirúrgico, es esencial en las técnicas de imagen y para las visiones endoscópicas, y modula las aplicaciones ergonómicas. 

Y como añade Merí, su campo de estudio se aplica a otras vertientes menos médicas, como las recreaciones virtuales en simuladores, los juegos de ordenador y hasta las películas animadas de nuevo cuño que, como la última de Tintín, se basan en la captación de movimientos corporales.

UNA PROMETEICA EXPERIENCIA VISUAL

El titán Prometeo fue considerado en la mitología griega como el creador y protector de la civilización humana, por la que se enfrentó a Zeus, cuya ira le castigó con diversas torturas. Su nombre encabeza uno de los textos y atlas anatómicos de mayor éxito en los últimos años. "Los Prometheus marcan un avance muy significativo en el tratamiento informático de las imágenes, por su gran realismo y su construcción por capas, lo que mantiene las referencias y ayuda mucho al aprendizaje", dice el profesor de Anatomía Àlex Merí. "Algunos manuales clásicos tenían excesivo texto en comparación con las imágenes. En los Prometheus se invierte la tendencia, haciendo del estudio de la Anatomía una experiencia visual y proporcionando un texto conciso y normalizado en su terminología anatómica, con gran número de referencias transversales". Editado por Panamericana y distribuido en tres tomos -Anatomía general y aparato locomotor, Órganos internos, y Cabeza, cuello y neuroanatomía-, cuenta con casi 3.000 ilustraciones y ha sido dirigido por los anatomistas alemanes Michael Schuenke, Erik Schulte y Udo Schumacher, junto con los artistas Markus Voll y Karl Wesker. La familia Prometheus ha generado además un Atlas asesorado por los americanos Anne Gilroy, Brian R. MacPherson y Lawrence M. Ross, así como fichas de autoevaluación, un atlas de cabeza y cuello para odontólogos y hasta una versión de las fichas disponible para el iPhone. "La mayor parte de los ilustradores clásicos trabajaban sobre papel, ya sea como pintores u otras técnicas, lo que dificultaba la modificación de los originales y una vez fallecidos, como ocurre en los Sobotta o Netter, han tenido que reinventarse, con cambios en maquetación y en imágenes, y textos renovados, incluso con nuevos ilustradores". El soporte informático de los Prometheus permite un gran crecimiento del banco de imágenes, ya que unas pueden basarse en otras con pequeñas modificaciones aunque profundas en su significado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario